La batalla que nos ofrecieron Manchester City y Real Madrid en la noche de ayer, quedará no solo marcada en la historia, sino en la memoria de todos los aficionados madridistas. Lunin, parando dos penaltis y con estiradas mágicas, se convirtió el héroe del partido.

Una noche inolvidable para Andrey Lunin

El partido que disputaron los dos mejores equipos en el panorama europeo, fue una auténtica locura. Una vez más los de Carlo Ancelotti, a pesar de no ser los favoritos, una vez más, vuelven a mostrar al mundo que la relación entre la entidad blanca y la Copa de Europa es mágica e idílica. Sin duda esta victoria y este pase a las semifinales tuvo varios jugadores como protagonistas: Rudiger, Rodrygo, Valverde, Carvajal… Pero hubo uno en especial que dio un paso adelante, demostrando que, sin duda, está en un momento de forma y de confianza enorme. El guardameta del Real Madrid, Andrey Lunin, fue la pieza clave para que los madridistas esperen ya al Bayern en las semifinales de esta Champions League.

Es cierto que los comienzos de Lunin en el Real Madrid no fueron los mejores. El guardameta ucraniano fue cedido en varias ocasiones, pasando por diferentes equipos con el fin de ganar confianza y experiencia bajo palos. El momento clave para él fue la lesión de Courtois a principios de temporada. Tras aquel imprevisto, el club fichó a Kepa pero con actuaciones como las de ayer, Andrey demostró ser el portero titular.

Anoche volvió a ofrecer una actuación magistral en portería. Desde el momento en que el colegiado señaló el arranque del partido, el ucraniano estuvo muy seguro bajo palos. El de ayer fue un partido que requirió en repetidas ocasiones la participación de Lunin a la hora de sacar el balón jugado. La perfección y el control con el esférico en los pies del ucraniano se vio reflejado en sus continuados desplazamientos de balón al pie. Los de Guardiola llegaron a sacar hasta 18 saques de esquina, en los que la mayoría, el guardameta acababa sacando el balón con los puños. Como era de esperar, los citizens amenazaron mucho y gran parte de su peligro llegaba desde la frontal del área con golpeos que a nada acabaron de perforar la red.

El único motivo por el cual el desenlace de estas jugadas no era un gol, fue Lunin. De nuevo, muy seguro a la hora de blocar balones o de despejarlos, desquiciando a los de Guardiola que veían muy complicado batir al ucraniano. El broche final de esta inolvidable noche lo puso en la tanda de penaltis. Tras 120 minutos de tensión y de fútbol, el semifinalista saldría de una frenética tanda de penaltis. El City comenzó tirando el primer penalti de la tanda, en el que Lunin poco pudo hacer. Pero la heroicidad llegaría en los dos siguientes. Y es que tanto Kovacic como Bernardo Silva, fueron incapaces de batir a Andrey. El ucraniano atrapó el segundo y el tercer penalti de los ingleses, dándole a Antonio Rudiger, la oportunidad de ser los semifinalistas y de eliminar al que es el vigente campeón.

De esta manera se acaba una noche europea más del Real Madrid que pasará a la historia. una vez más se vuelve a demostrar que este equipo tiene algo especial una unión y un sentimiento que ningún otro equipo jamás podrá imaginar, por lo que el Real Madrid, ya es nuevo semifinalista de la Champions League.