El año 2024 traerá para el Real Madrid atractivos desafíos en Liga, Copa y Champions, en la batalla para seguir liderando el fútbol europeo frente al monopolio de la UEFA y en la necesidad de reforzar una plantilla de brillante futuro

Con el 2023 a punto de echar el cierre para dar la bienvenida al 2024 es el momento de analizar los retos que el nuevo año traerá consigo en clave Real Madrid. Seguir sumando títulos, la inauguración del nuevo Bernabéu, la recuperación de los lesionados de larga duración y acertar con los nuevos fichajes para que el equipo que siga compitiendo en la élite son los retos a los que se enfrenta el equipo presidido por Florentino Pérez de cara al nuevo año.

Seguir ganando

Enero, como siempre,  será un mes clave. Lo apretado del calendario hace que para arrancar el año se solapen hasta tres competiciones. En Liga, con el equipo líder empatado a puntos con el Girona y con siete puntos de ventaja sobre Barcelona y At. Madrid, los primeros partidos en la competición de la regularidad se antojan muy importantes para mantener distancias ante los perseguidores y poder seguir en lo alto de la tabla. Ganar el Mallorca en el Bernabéu en el primer partido del año es fundamental para empezar el año con buen pie.

El regreso de la Copa la noche de Reyes supondrá uno de los partidos más comprometidos del inicio de año. Defender el título logrado en la Cartuja frente a Osasuna el pasado mes de mayo será otro de los retos de 2024. La primera eliminatoria contra el Arandina de Primera RFEF obligará a los jugadores a ponerse el mono de trabajo para evitar sustos.

Primer título en juego

La Supercopa de España entre el 10 y el 14 de enero del 2024 será una buena piedra de toque para ver el momento de forma del equipo tras las vacaciones navideñas. La semifinal contra el At. Madrid y una hipotética final frente al ganador del Barcelona- Osasuna hace que el primer título del año en liza obligue a los pupilos de Ancelotti a jugar cien por cien ante la entidad de los rivales.

En Champions League es tiempo de paréntesis hasta febrero, cuando tendrá lugar el doble enfrentamiento frente al RB Leipzig alemán. Llegar al cien por cien a la eliminatoria de octavos será seguro el gran objetivo del cuerpo técnico en lo que al apartado físico se refiere. Encarar febrero con la máxima confianza y en buen estado físico y mental es básico para, una temporada más, estar en disposición de traer la Decimoquinta a las vitrinas.

Regreso de los lesionados

La plaga de lesiones que asoló al equipo en el tramo final del año tuvo, dentro de lo negativo, un punto positivo, pues se pudo comprobar la valía de la plantilla confeccionada el pasado verano en un rush final casi perfecto que incluyó seis victorias y un empate en los últimos siete partidos del año entre Liga y Champions.

El equipo no solo se sobrepuso sino que fue capaz de dar lo mejor de sí para acabar el año al frente de la Liga además de cerrar la primera fase de la Champions con un pleno de victorias. La vuelta  de los Tochouameni, Vinicius, Camavinga o Carvajal así como el esperado final del calvario de lesiones que ha mantenido a Arda Guler en el dique seco desde su fichaje, hacen que el año comience sin colas en la enfermería. Con buena parte de la plantilla ya recuperada el renovado Carlo Ancelotti podrá empezar a mover con habilidad sus piezas para hacer que el equipo esté en disposición de luchar con garantías por todos los títulos en juego.

¿Se fichará a un central?

¿Fichará el Madrid a un central para sustituir a Alaba?  Esa es la gran pregunta que los aficionados blancos se hacen. Afrontar lo que resta de temporada tan solo con dos centrales puros como son Nacho y Rudiger puede ser una temeridad. La reaparición de Militao, que podría volver a partir de marzo, no debe hacer olvidar la gravedad de la lesión del brasileño. Una rotura de ligamento cruzado anterior requiere mucha paciencia en la recuperación y una incorporación gradual a la dinámica competitiva. En idéntica tesitura está Courtois. Ambos reaparecerán esta temporada, aunque competitivamente es seguro que no estarán al 100% hasta el curso  que viene.

Mercado 2024-2025

El mercado de fichajes del 2024 tendrá un nombre propio. Kylian Mbappé entra en su último año de contrato, lo que habilita a cualquier club a negociar con el francés desde las doce de la noche de hoy domingo. Al margen de que el fichaje del delantero del PSG pueda llevarse a cabo o no la llegada de Endrik, el último diamante en bruto del fútbol brasileño, reforzará la línea de ataque e inyectará ilusión en los aficionados ¿Será con ello suficiente? Es seguro que la dirección deportiva peina el mercado en busca de atacantes que encajen, por precio, edad y categoría futbolística en la filosofía del club.

Apuntalar los laterales parece ser la otra gran necesidad de la plantilla. Mendy acaba contrato y suena con fuerza el nombre del canadiense del Bayern de Munich Alphonso Davies, cuyo vínculo con los alemanes expira en 2025. Repetir la operación que hace diez años trajo a Kroos a Chamartín desde Munich a falta de un año para que acabase su contrato parece una opción que puede llegar a concretarte, aunque el mercado actual dista mucho del de hace una década.

El mejor campo del mundo

Cuatro años después de comenzar las obras la próxima primavera tendrá lugar la esperada inauguración del nuevo Santiago Bernabéu, el mejor campo del mundo. La espectacular obra de ingeniería que ha cubierto el terreno de juego y que guarda el césped para su conservación en las entrañas del fondo sur hará que el estadio pase a ser una fuente de ingresos capital que permita al club seguir compitiendo al máximo nivel con activos propios. Conciertos en cualquier fecha del año, partidos de la NFL o exhibiciones de otros deportes serán algunos de los eventos que a partir de ahora serán habituales en el recinto deportivo más importante del planeta.

El año de la Superliga

Por último, 2024 será también un año clave para el renacimiento del fútbol europeo en base a valores y normas que hagan que todos los clubes compitan en igualdad de condiciones. Para ello es necesario que la Superliga siga dando pasos firmes. El histórico fallo de pasado 21 de diciembre en el que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) tachó a UEFA y FIFA de monopolistas abre un nuevo escenario en el mundo del fútbol. Las amenazas de Ceferin para evitar que los clubes piensen por sí mismos son agua pasada. Desde ya se abre un nuevo horizonte que más pronto que tarde cristalizará en una nueva competición continental más atractiva para los aficionados en la que los clubes, por fin, serán los dueños únicos de sus destinos.

Urge una competición en la que los equipos cumplan por igual las normas económicas y en la que la atención de los aficionados se mantenga intacta durante todo el desarrollo de la misma. El año que ahora comienza debe ser en el que se pongan los cimientos del futuro. Un futuro en el que el R. Madrid, principal promotor de la batalla judicial que ha provocado el histórico fallo del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), seguirá abogando por un nuevo modelo que finiquite el caduco monopolio de Ceferin.