El Santiago Bernabéu fue testigo de un nuevo recital blanco. Los de Ancelotti volvieron a demostrar por qué el Real Madrid está líder de la competición liguera y clasificado en Champions. Nuevo recital para la afición de Bellingham y Rodrygo, una dupla que se afianza cada vez más con el paso de los días.

El Real Madrid salió con el siguiente once:

Por parte del Villareal:

Primera Parte

El colegiado señaló el inicio del encuentro y el balón ya rodaba por el césped del Santiago Bernabéu. Los de Ancelotti vistiendo de blanco mientras que el submarino amarillo vestía de amarillo, ambos con la primera equipación. Con el pinchazo de Atlético de Madrid y Barcelona, al Real Madrid se le presentó la oportunidad de oro para tomar distancia en la parte alta de la clasificación a la espera de que jugara el Girona.

La primera mitad del encuentro estuvo monopolizada por el Real Madrid que dominó el control del balón y los cambios de orientación de un lado a otro. Desde el arranque del partido los de Ancelotti controlaron el partido sin ningún tipo de problema. Como viene siendo costumbre, Bellingham abrió el marcador con un remate de cabeza picado abajo. Se pudo ver un Madrid con una presión muy alta que provocó numerosas recuperaciones de los blancos.

El conjunto merengue gozó de un par de buena ocasiones que a nada estuvieron de subir al marcador en nada más arrancar el partido. Bellingham estrelló un gran remate de cabeza cercano a la línea del área rival y el Madrid se ponía por delante. En la recta final de la primera mitad el austriaco Alaba cayó tendido en el centro del terreno de juego y se marchó a una pierna acompañado de los médicos del club blanco. En resumen, control y dominio total del esférico y constantes llegadas al área rival de los de Ancelotti. Tras un córner con polémica por un posible fuera de juego de Rodrygo, el brasileño ponía el 2-0 aprovechando un rechazo suelto en el área y mandar dos arriba para los blancos al descanso.

Segunda Parte

La segunda mitad comenzó más calmada con un ritmo menor al de la primera mitad. La tónica del encuentro fue la misma. Con el partido en sus manos, el técnico italiano, Carlo Ancelotti, realizó un cambio , el de Ferland Mendy, el francés no llegó a volver a ingresar al terreno de juego ya que le sustituyó su compañero Fran García por molestias en la pierna derecha.

En los primeros compases de los segundos 45 minutos fue el Real Madrid que controló la posesión, sintiéndose cómodo moviendo el esférico de un lado a otro. El Villareal recortó distancia con un gol de Morales en el minuto 54 , pero de poco sirvió. En el 61 de partido tras un grandísima individual de Brahim incluyendo un recorte al defensor, el malagueño ponía por delante a los blancos y joven futbolista recuperaba una vez más la sonrisa. Con este resultado el Real Madrid se colocaba líder de la competición liguera y mostrando su clara superioridad.

Poco después, Modric hacía el 4-1 tras dejar la ley de la ventaja el colegiado en una jugada de Rodrygo que se internaba en el área rival. El croata aprovechó un balón suelto y lo mandó al fondo de las mallas para redondear el encuentro. En el 80 de partido el partido ya estaba más que resuelto. Ancelotti retiró del terreno de juego a Bellingham que era sustituido por Ceballos y a Toni Kroos, sustituido Tchouaméni.

Victoria del Real Madrid en el último partido del Real Madrid en el Santiago Bernabéu en lo que queda de 2023. Los blancos cierran una vuelta prácticamente prefecta, en lo más alto de la clasificación y con mejores sensaciones que nunca. Un partido que dominaron de principio a fin y que supuso un festival para la afición blanca que disfrutó a más no poder.