Fuente: Remontada Blanca

Ganar en Mánchester: territorio conocido para el Real Madrid

14 de abril de 2024

Cuartos de final Mánchester City Máncheter United Real Madrid UEFA Champions League

Autor:
Emilio Gracia


El conjunto blanco buscará el miércoles ante el Mánchester City una gesta similar a la lograda hace veinticuatro años frente al United, también en cuartos de final de la Liga de Campeones, cuando se impuso por 2-3 en Old Trafford para acceder a las semifinales de la temporada 1999-2000

Raúl celebrando el 0-2 en Old Trafford.

Ir a Mánchester a jugarse a cara o cruz unos cuartos de final de la Liga de Campeones no es un territorio inexplorado para el Real Madrid. El Rey de Europa ya cruzó con éxito ese Rubicón en abril del año 2000, cuando tras empatar a cero en la ida de los cuartos de final frente al Mánchester United, venció en Old Trafford por 2-3 en una de las mayores exhibiciones de los blancos en la máxima competición continental. En esta ocasión la cita con la historia será en la misma ciudad pero en otro estadio y ante un rival diferente: el Mánchester City de los petrodólares propiedad de Abu Dabi.  

Similitudes con el partido del miércoles

Las coincidencias entre el partido jugado hace veinticuatro años y el que tendrá lugar el próximo miércoles son varias. Primera similitud: el Mánchester City, al igual que el United en la temporada 1999-2000, era el vigente campeón de Europa y máximo favorito para revalidar el título. Segunda similitud: aquella eliminatoria, como la actual, enfrentaba a los dos últimos campeones de Europa. Tercera similitud: los chicos de Alex Ferguson, como ahora el conjunto de Pep Guardiola, habían ganado la temporada anterior el triplete y su fútbol parecía insuperable para todos… salvo para el Real Madrid, acostumbrado a escribir las páginas más brillantes de su historia sobre suposiciones aparentemente imposibles.  Cuarta similitud: el United del curso 1999-2000 acumulaba tres temporadas seguidas sin conocer la derrota en Liga de Campeones en Old Trafford, mientras que el Mánchester City suma 30 partidos consecutivos invicto como local en Europa, con 28 derrotas y 2 empates.

Alineaciones publicadas por el AS el 19 de abril del 2000. Helguera aparece en el centro del campo pero jugaría de líbero. Diario AS

Un equipo muy irregular

El Real Madrid del año 2000 vivía una temporada muy convulsa. Lorenzo Sanz había renovado la plantilla que había ganado la Séptima con la incorporación de jugadores como McManaman, Elvir Baljic, Geremi, Michel Salgado o Nicolás Anelka, el Mbappé de la época y unos de los mayores talentos fabricados por el fútbol francés. El galés John Benjamin Toshack, en su segunda etapa en el banquillo del Bernabéu, había sido cesado en noviembre, cogiendo las riendas del equipo Vicente del Bosque. Era un equipo que mezclaba la veteranía de los Redondo, Sanchís, Hierro o Roberto Carlos, con la juventud de Raúl, Morientes o Salgado, y el descaro de un imberbe de apellido Casillas y nombre Iker que con apenas 18 años se había hecho con la titularidad bajo los palos.

La irregularidad era la tónica de un conjunto que alternaba exhibiciones con derrotas sonrojantes, como un 1-5 en el Bernabéu en Liga frente al Zaragoza. Las expectativas puestas en aquella plantilla y en Nicolás Anelka estaban por las nubes y los resultados estaban siendo decepcionantes. El delantero francés de 21 años tenía el mejor futuro en sus botas pero su carácter introvertido (no tenía relación alguna con sus compañeros), la excesiva presión que debía soportar por los 5.500 millones de pesetas que el club había pagado al Arsenal por su traspado (33 millones de euros),  y un entorno complicado (se pasaba el día en casa con su hermano y amigos pegado a los videojuegos), hacía que no terminara de explotar. Su primer gol de blanco no llegó hasta diciembre y fue en un partido amistoso.

Portada del diario AS del jueves 20 de abril del año 2000.

Duelo entre los dos últimos campeones

En esas el sorteo de los cuartos de final de la Liga de Campeones emparejó al Real Madrid frente al Mánchester United, el coco de Europa. El equipo presidido por Lorenzo Sanz se había clasificado como subcampeón de grupo en la segunda fase de la Champions tras perder los dos partidos frente al Bayern de Munich por goleada (2-4 en Madrid y 4-1 en Alemania), y vencer en Kiev frente al Dinamo por 2-3 con el campo nevado,  y 0-1 en Noruega ante el Rosenborg con un gol de Guti. Para las casas de apuestas no había color y la única duda era saber por cuánto iba a ganar el Mánchester United.

La ida, disputada en el Santiago Bernabéu, paralizó al universo fútbol al igual que lo sucedido el pasado martes. Frente a frente estaban los dos últimos campeones de Europa,  ¿les suena?  El 0-0 final dejó un mal sabor de boca entre la afición merengue. El Madrid tuvo las mejores ocasiones frente a un Mánchester United muy especulativo, pero el poco acierto de cara a puerta de los atacantes hizo que el marcador no se moviese. Quince días después -un 19 de abril miércoles de Semana Santa-,  el equipo entrenado por Del Bosque salió a jugarse la vida a una única carta en Old Trafford, donde era necesario ganar para pasar a semifinales, o empatar a más de un gol al estar vigente la norma que multiplicaba por dos el valor de los tantos conseguidos a domicilio en caso de tablas.

Portada del diario Marca del jueves 20 de abril del año 2000

Un partido Redondo

El técnico salmantino se sacó de la manga un esquema con tres centrales que explotaba la calidad y velocidad de Roberto Carlos y Salgado por los laterales. Helguera era el libre y Karanka e Iván Campo los marcadores. En el medio Fernando Carlos Redondo Neri manejaba los hilos del equipo como el que se bebe una cerveza sentado en el sofá de su casa, secundado por el inglés McManaman, con Raúl de enganche y Savio y Morientes arriba. Ferguson no varió el clásico 4-4-2 de los equipos ingleses de la época, con Beckham y Giggs como puñales por las bandas, Keane y Scholes en la sala de máquinas, y dos delanteros letales en punta de ataque como eran  Cole y Yorke.

El en aquel momento siete veces campeón de Europa, vestido para la ocasión de negro en una equipación que pasó a ser icónica, salió sin complejos al teatro de los sueños. Cogió el balón y lo empezó a mover con rapidez, saltando la presión del United con balones en largo y salidas por los laterales. Salgado y Roberto Carlos subían sin descanso por ambos costados mientras Raúl, entre líneas, era indetectable e incontenible para la los zagueros ingleses. En el minuto 19 un centro de Michel Salgado es desviado por Keane el fondo de las mallas. El 0-1 agigantó al Real Madrid, que dominaba todas las facetas del juego, salvo en un arreón de 10 minutos en los que Casillas y la defensa de tres centrales contuvieron con alguna dificultad el bombardeo aéreo de los ingleses.

Un cuarto de hora para la leyenda

Ha pasado casi un cuarto de siglo pero los primeros quince minutos de la segunda parte de aquel partido siguen siendo unos de los más brillantes del Real Madrid en toda su historia. En el minuto 50 Raúl cogió un balón al borde del área y de tiró cruzado con efecto al segundo palo puso el 0-2. Ver para creer. Si bueno fue el segundo gol, mejor iba a ser el tercero. Redondo, en una acción para la leyenda, se quitó de encima a Scholes en la banda izquierda con un taconazo que le llevó hasta línea de fondo, apareciendo Rául como un rayo desde atrás para rematar a gol el pase de la muerte del argentino. Millones de aficionados en todo el mundo acababan de presenciar una de las mejores jugadas de todos los tiempos.

Roy Keane y Redondo pugnando por un balón en el centro del campo. Imagen AS

El súper favorito Mánchester United era un títere en manos del Real Madrid, que tenía el pase a semifinales cerrado con media hora por delante ante la atónita mirada de los aficionados locales. Dos fogonazos de los diablos rojos en el tramo final del encuentro pusieron el definitivo 2-3 en el marcador en una noche mágica. Lorenzo Sanz, eufórico, acabó entrando en el Carrusel Deportivo de la cadena SER desde las gradas para comentar en directo los cinco últimos minutos del partido.

“El Real Madrid me ha impresionado”, dijo Ferguson en la sala de prensa. El escocés no escatimó en elogios hacia Redondo: “El balón siempre le caía a él, parecía que tenía un imán en los pies”.

Camino hacía la Octava

Aquella Champions acabó con el Real Madrid levantando la Octava. En semifinales, con una actuación estelar de Nicolás Anelka, los merengues se vengaron de las dos goleadas encajadas ante el Bayern de Munich en la segunda fase, ganando por 2-0 en Madrid y perdiendo 2-1 en Baviera. Por la otra parte del cuadro Valencia y Barcelona se enfrentaron por un puesto en la final, pasando los ches por un global de 5-2.

La final no tuvo color y el Madrid, dos años después de la ansiada Séptima, logró la Octava goleando en la final disputada en París al Valencia por 3-0. El chute de moral que supuso el triunfo en Mánchester en la vuelta de los cuartos de final ante un equipo que parecía inabordable convirtió al Rey de Europa en imparable. Ojalá que veinticuatro años después la historia se repita y el Real Madrid vuelva a escribir otra página de oro en su inigualable historia ganando a domicilio, esta vez, al Mánchester City. Confíen.

BUSCAR

ENTRADAS RECIENTES

CATEGORÍAS

ETIQUETAS