El Real Madrid y el Santos se enfrentaron en el Santiago Bernabéu en junio de 1959 con motivo del homenaje a Miguel Muñoz. El campeón de Europa se impuso por 5-3 y Pelé dejó muestras de su calidad anotando de manera espectacular el primer gol del partido

Di Stéfano y Pelé posando juntos tras el partido. Imagen AS

Si el Real Madrid es el mejor equipo de la historia a nivel de clubes Brasil es la mejor selección de todos los tiempos.  Son  los dos conjuntos más prestigiosos del universo fútbol. El próximo martes la canarinha  visitará el Santiago para medirse a la selección española. Será la segunda  vez que la pentacampeona del mundo juegue en el recinto del catorce veces campeón de Europa, aunque la primera que se contabilizará como oficial.

En 1959 Edson Arantes Do Nascimento, Pelé, el jugador más grande que ha dado Brasil y para muchos el mejor de la historia, jugó por primera y única vez contra el Real Madrid en un duelo  organizado con motivo del homenaje a Miguel Muñoz que hizo correr ríos de tinta. Fue la primera de las catorce veces que Pelé se vistió de corto en nuestro país -todas en partidos amistosos anotando en total 13 goles-, y la única vez que se enfrentó a Di Stéfano y al Real Madrid.

Duelo de mitos

El partido en honor a Miguel Muñoz  fue un duelo entre los dos jugadores más famosos del planeta en aquel momento: el joven Pele de  18 años, y el ya veterano Alfredo Di Stéfano, de 32 primaveras. El Santos, mejor equipo de Sudamérica, contra el Real Madrid, mejor equipo de Europa. Los locales, por deferencia hacía el visitante, vistieron de azul, dejando a los brasileños lucir su habitual uniforme blanco.

Pelé se presentó en el Bernabéu el 17 de junio de 1959 como campeón del Mundo tras levantar la canarinha un año antes en Suecia su primer entorchado mundial. Con tan solo 18 años pocos dudaban ya de que aquel chico de cuerpo atlético fuese el mejor delantero del mundo. Enfrente estaba el vigente campeón de Europa, quince días después de levantar frente al Stade de Reims en el Neckarstadion de Stuttgart su cuarta Copa de Europa consecutiva. 

Pelé posando para los fotógrafos antes del inicio del partido. Imagen MARCA

Mucho más que un amistoso

Los amistosos en aquella época tenían para prensa y aficionados la vitola de partido oficial, y más si los contendientes eran de continentes diferentes. En juego, ni más ni menos, estaba el prestigio de clubes y futbolistas. El conjunto blanco contó con dos refuerzos de lujo; por un lado el legendario jugador del Athletic de Bilbao Piru Gainza, que ese año colgó las botas y era íntimo amigo de Miguel Muñoz. Su “fichaje” hizo que Paco Gento corriese por la banda derecha durante la primera parte, para volver a su hábitat natural en el costado zurdo en los segundos cuarenta y cinco minutos. El otro «fichaje» fue el del bético Luis del Sol, que acabaría firmando por el Real Madrid en abril de 1960. Ver a jugadores de otros clubes tomar parte con el equipo local en este tipo de partidos era de lo más común.

De izquierda a derecha Piru Gainza, Miguel Muñoz y Luis del Sol antes del inicio del partido. Imagen AS

El Santiago Bernabéu rozó el lleno en una tarde de imborrable recuerdo para los que presenciaron en directo el encuentro. Pelé no defraudó y dejó muestras de su impresionante calidad ante los aproximadamente 100.000 espectadores que poblaron las gradas. Habían pasado tan solo nueve minutos desde el pitido inicial cuando el número diez del Santos abrió el marcador con un certero disparo desde fuera del área. La reacción madridista fue fulgurante y Mateos, con dos goles en los minutos 19 y 25, dio la vuelta al marcador.

El partido era frenético y de un nivel técnico altísimo. Antes del descanso Mateos redondeó su gloriosa tarde y aumentó la diferencia en el marcador a 3-1 firmando un hat trick.

Puskas y Gento se unen a la fiesta

A los nueve minutos de la reanudación el delantero brasileño Pepe recortó distancias desde el punto de penalti. En una fiesta de jugadas de enorme nivel y goles no podía faltar la aportación de Puskas. El voraz atacante húngaro hizo el 4-2 en el  minuto 57, tres minutos después de ingresar en el verde en sustitución de Mateos. Su tanto fue el más bello de la tarde según las crónicas. Del Sol inició el ataque en posición de interior derecha realizando una gran combinación con Gento II, que centró con precisión para que Puskas rematase en plancha de cabeza ante la pasibilidad del guardameta brasileño que nada pudo hacer para evitar el tanto.  En el minuto 63 el Santos, por medio de Coutinho, recortó distancias y puso el 4-3.

Ataque sin freno

Con casi media hora por delante ambos conjuntos, cada uno con su estilo, se lanzaron al ataque. A falta de seis minutos para el pitido final Paco Gento finiquitó el duelo marcando el quinto tanto de la noche para delirio de unos aficionados que estaban presenciando un espectáculo de quilates.

Di Stéfano se quedó sin marcar pero ofreció su amplio repertorio de su juego ordenando los ataques del Real Madrid y corriendo y defendiendo por todas las parcelas del campo. El argentino y Pelé posaron para la posteridad finalizado el duelo en la primera y única vez en la que sus carreras coincidieron sobre el césped. Las crónicas de la época se deshicieron en elogios hablando de un partido con “lances extraordinariamente bellos”  y  jugado “a todo gas” entre dos equipos con estilos muy diferentes: juego en corto por parte de Santos frente a un Real Madrid que buscaba la velocidad y la verticalidad en todas sus acciones.

Un encuentro con varias anécdotas

El partido dejó dos anécdotas para el recuerdo. La primera de ellas fue que el homenajeado no jugó el partido. El antiguo capitán se había retirado un año antes y declaró que no se vistió de corto por estar fuera de forma, evitando así dejar en los aficionados un mal recuerdo. Miguel Muñoz, asesor técnico de la junta directiva del Real Madrid en aquel momento, acabó la temporada siguiente (1959-1960) al frente del primer equipo como entrenador, levantando en Glasgow la Quinta Copa de Europa.

La segunda anécdota fue que dos de los tres hermanos Gento se alinearon juntos sobre el terreno de juego. En una época en la que los cambios en partidos oficiales no estaban permitidos salvo en caso de lesión del portero, los amistosos daban un pequeño respiro. El Real Madrid hizo tres cambios y los brasileños dos. Gento II (Julio Gento) sustituyó a Gainza en el descanso ocupando el extremo derecha, pasando la Galerna del Cantábrico a su posición natural de extremo izquierda.

Segunda visita en 1966

Pelé volvería al Santiago Bernabéu en junio de 1966 para disputar un amistoso frente el Atlético de Madrid semanas antes del inicio del Mundial de Inglaterra en el que los brasileños buscaban su tercer título consecutivo. El partido fue organizado por la Asociación de la Prensa y los rojiblancos eran los actuales campeones de Liga, jugándose en el feudo blanco al estar el Vicente Calderón en construcción. Brasil se impuso por 3-5 y Pelé deslumbró con tres goles, marcando los otros dos Lima y Amarildo. El inolvidable extremo derecha Garrincha jugó la última media hora deleitando al público con jugadas repletas de magia y talento.

El partido no aparece en los registros de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), por lo que si bien fue la puesta de largo de la selección de Brasil en el Santiago Bernabéu no lo fue de manera oficial, circunstancia que tendrá lugar el próximo martes.

Ficha técnica Real Madrid 5-3 Santos

Santos: Carlos; Dalmo, Pavao, Ramiro, Getulio; Álvaro (Alfonsinho min 74), Zito; Doval, Pagao (Coutinho min 25), Pelé y Pepe.

Real Madrid: Berasaluce; Marquitos (Atienza II min 74), Santamaría, Casado; Santiesteban, Ruiz; Mateos (Puskas min 54), Del Sol, Di Stéfano, Gainza (Gento II min 46) y Gento. 

Goles: 1-0 Pelé min 9; 1-1 Mateos min 19; 2-1 Mateos min 25; 3-1 Mateos min 37; 3-2 Pepe (penalti) min 54; 4-2 Puskas min 57; 4-3 Coutinho min 63;  5-3 Gento min 84.