Anfield atropella a los de Ancelotti

El Real Madrid sigue complicándose la vida en esta nueva edición de la Champions League, con solo dos victorias esta cerca de quedar eliminado de la competición Europea.

El muro blanco contiene al Liverpool

En la primera parte del encuentro ya vimos las armas que tiene este Liverpool para destrozar a sus rivales; Thibaut Courtois y Raúl Asencio salvaron al Real Madrid del gol inglés.

El joven canterano salvó un balón que ya se colaba en la portería en los primeros 20 minutos de partido, Gravenberch y Mac Allister fueron los tapones perfectos; interrumpieron las posibles llegadas ofensivas del club blanco.

Camavinga fue uno delos mejores de los blancos, cortando todo tipo de balones peligros; evitando que Curtis Jones, Mohamed Salah y Darwin Nuñez llegarán con peligro a las inmediaciones del área del arquero belga.

Courtois no fue suficiente

Los blancos sufren al Liverpool de Arne Slot, el ritmo de vértigo del conjunto red los hace imparables y aunque Courtois con varias intervenciones frustró a Salah, el Liverpool consiguió ganara pesar a haber fallado un penalti.

En el ecuador de la segunda mitad el Real Madrid tuvo la oportunidad de empatar el tanto red, pero Kylian Mbappé erró su lanzamiento desde el punto de penalti.

Los de Slot sentenciaron el encuentro con un potente cabezazo a la salida de un córner de Gody Gakpo. Con esta victoria el Liverpool se asegura estar en la siguiente ronda, sin embargo los de Ancelotti penden de un hilo.

La noche en Anfield fue aún más dura y amarga, Camavinga tuvo que salir del terreno de juego en la segunda mitad por unas molestias en el isquio y se someterá a pruebas mañana en Valdebebas para ver el alcance de su lesión.

Finalmente tras acabar el encuentro, Luka Modric intentó tranquilizar al madridismo con las siguientes palabras: «Está complicado pero no imposible aún se puede estar entre los ocho primeros pero no se puede fallar más».