22 de marzo de 2025
Autor:
Álvaro Esteban Cordovilla
Un gol en la segunda mitad (1-0) sentenció a un Real Madrid C que no encontró soluciones en ataque
El Real Madrid C visitaba Matapiñonera con la urgencia de reencontrarse con la victoria tras tres partidos sin ganar. El segundo filial blanco afrontaba un duelo crucial ante el Sanse, un rival directo en la lucha por la permanencia. Los de La Fábrica buscaban sumar tres puntos vitales para salir de la zona peligrosa, mientras que el conjunto local llegaba en un buen momento tras dos triunfos consecutivos. Un encuentro marcado por la necesidad y la presión de ambos equipos.
El primer tiempo comenzó sin un dominador claro, con desplazamientos constantes de un lado a otro. Sin embargo, el Sanse no tardó en asomar el colmillo y lanzó dos ataques peligrosos. En primer lugar, Mario probó suerte con un potente disparo desde la frontal del área. Acto seguido, Fer estuvo a punto de inaugurar el marcador con un remate de cabeza que pasó rozando el larguero.
Transcurridos 15 minutos, Manu protagonizó una internada vertiginosa por la banda izquierda, penetrando hasta el área pequeña y generando una ocasión clara de peligro. Por otro lado, una parte del juego del conjunto blanco pasaba por las botas de Cristian David. De hecho, el mediocentro español se convertiría en el protagonista de una de las acciones más importantes del encuentro. Tras penetrar en la defensa rival y sembrar el caos, Cristian ejecutó un disparo que fue repelido por Lejárraga.
A partir de ese momento, el filial blanco empezó a reaccionar y el runrún se hizo notar en la grada local, que observaba con preocupación cómo su equipo estaba siendo sometido. Mientras tanto, Moya buscó anotar el gol de su vida y estuvo a punto de lograrlo tras una espectacular jugada en la que dejó atrás a tres rivales con una gran velocidad.
Por su parte, Joselu Sánchez, muy activo durante todo el partido, no dejó de dar indicaciones a los suyos desde el área técnica, tratando de corregir posiciones y mantener la intensidad del juego.
Los segundos 45 minutos arrancaron sin grandes sobresaltos, con el combinado de Manolo Sanlúcar llevando la voz cantante. Desde el inicio, Carlos Rodríguez intentó despertar a sus compañeros, quienes habían salido algo dormidos.
A medida que avanzaban los minutos, las ocasiones de gol seguían sin aparecer. Sin embargo, todo cambió en el minuto 66, cuando llegó el tanto del Sanse. Un balón muerto en el interior del área fue aprovechado por Fer Harta, quien no perdonó y envió el esférico al fondo de la red.
Por desgracia para el filial blanco, los pupilos de Joselu comenzaron a desesperarse, y con razón: el Sanse se había hecho dueño absoluto del partido. Además, el Real Madrid no lograba penetrar ni el centro del campo ni la defensa rival, que se mantenía firme y ordenada.
Pese a todo, el conjunto madridista no dejó de intentarlo hasta el pitido final. No obstante, el esfuerzo no fue suficiente y se quedó sin la recompensa de, al menos, rescatar un punto.
XI Real Madrid C: Quetglas; Calleja, Alfredo, Manu; Moya, Cristian (Bruno 70′), Carlos (Márquez 84′), Romera, Emanuel (Nico 70′); De Llanos y Jacobo (Carvajal 78′).
Entrenador: Joselu Sánchez.
XI Sanse: Lejárraga; Edu, Tito, Piri, Héctor, Pol; Yago, Eneko (Álvaro 70′), Mario (Aarón 81′), Fer (Ortiz 81′); Ariel.
Entrenador: Manolo Sanlúcar.
Árbitros: Sánchez Ingidua, Cubas Sánchez (asistente 1) y Pablo Gómez (asistente 2).
Estadio: Matapiñonera.