2 de diciembre de 2023
Autor:
Iván Castejón
Partido tras partido, Bellingham sigue asombrando al mundo del fútbol con sus actuaciones. El nivel del jugador inglés parece no tener techo y muchos ya hablan de la reencarnación del mítico Zinedine Zidane.
Como en la mítica película de «El día de la marmota», Bellingham parece estar atrapado en un círculo temporal de grandeza que se repite en cada partido que disputa. La mítica y famosa celebración del jugador inglés se está convirtiendo en costumbre, habiendo anotado esta temporada 15 goles en 16 partidos siendo centrocampista. Además de su valiosa contribución goleadora, el exfutbolista del Borussia Dortmund ha aportado también 4 asistencias, ayudando al equipo en todas las facetas ofensivas.
Pero su papel no se limita únicamente al aspecto ofensivo. Bellingham posee un despliegue físico impresionante que le permite contribuir en tareas defensivas junto a sus compañeros. El nuevo número 5 del Real Madrid ha logrado un total de 51 recuperaciones en La Liga, cifras asombrosas que pueden ser comparadas con el actual pivote del Real Madrid, Tchouaméni, que ha conseguido 40.
A día de hoy, Carlo Ancelotti cuenta con un jugador único que no solo se establece como el pilar fundamental del equipo, sino que también deslumbra con un fútbol único que hace disfrutar al aficionado: «Bellingham sorprende cada día. Es un regalo para el fútbol», declaró el técnico italiano después del partido frente al Nápoles.
Con la elegancia inigualable de Jude y con un estilo de juego especial, muchos pusieron sus ojos en las botas que utilizó contra el Nápoles. Estas botas negras, con la lengüeta roja y las líneas de Adidas en blanco, eran ni más ni menos que una réplica de las Adidas Predator con las que Zinedine Zidane marcó una época. Las mismas con las que el futbolista galo marcó su mítico gol de volea en Glasgow para darle la novena Copa de Europa al Real Madrid.
La elegancia y el estilo de juego de Bellingham evocan fuertemente al Zinedine Zidane que enamoró al mundo. A pesar de estas similitudes, Ancelotti destacó pequeñas diferencias entre ambos jugadores: «Es difícil comparar dos generaciones distintas. Lo que veo de distinto es que Bellingham tiene una llegada dentro del área que Zidane no tenía, y Zidane tenía una calidad individual que Bellingham no tiene».
El fútbol sigue evolucionando y es inevitable caer en comparaciones, pero lo que sí tenemos claro es que Bellingham, en cada partido, sigue dejando su propia huella, lo cual lo llevará a consagrarse como uno de los mejores futbolistas de la próxima década.